Una planta es cualquiera de la inmensa cantidad de organismos en el reino biológico Plantae, en general, estas especies se consideran de motilidad limitada, y generalmente fabrican su propio alimento. Se incluyen una serie de organismos conocidos como árboles, hierbas, arbustos, enredaderas, helechos y musgos. Convencionalmente el término planta implica un taxón con características multicelulares, que contienen paredes de celulosas, y organismos capaces de realizar fotosíntesis.

Puedes profundizar en:

• Fotosíntesis
• Polinización y dispersión de semillas en las plantas
• Las estructura de una planta: sus partes 
• El reino vegetal 
• Plantas con flores
• Ciclo de vida de las plantas 
• Clasificación de las plantas

Para aprender más sobre las diferentes especies de plantas vea : Lista de plantas.

Taxonomía y terminología. A lo largo de la mayor parte de la historia de la ciencia,  desde Aristóteles hasta Linneo y en el siglo 20, las especies se dividieron en dos reinos: animales y plantas. Impulsada por caracterizaciones y análisis de ADN, los hongos y bacterias han sido eliminados a reinos separados, en particular, los hongos tienen paredes celulares que contienen quitina, en lugar de celulosa. Los líquenes, que son una asociación simbiótica de hongos y un organismo fotosintético, generalmente no se consideran plantas en el más puro sentido de la taxonomía. Los virus tampoco se consideran plantas, ya que no tienen una celda propia, sino que habitan en una célula huésped de otro organismo, por otra parte, en muchas clasificaciones no se consideran un organismo vivo en absoluto. Los mohos de limo, tampoco son considerados plantas, sino más bien son heterótrofos que pueden ingerir bacterias, esporas de hongos, y otras partículas.

El estudio científico de las plantas, conocido como botánica, ha identificado cerca de 350.000 taxones de plantas existentes, que se definen como; plantas de semilla, briofitas, helechos y plantas afines. A partir de 2008, aproximadamente 400.000 especies de plantas han sido descritas, de las cuales aproximadamente el noventa por ciento son plantas con flores.

Las plantas vasculares tienen tejidos lignificados y estructuras especializadas llamadas xilema y floema, que transportan agua, minerales y nutrientes desde las raíces hacia arriba, y los azúcares de retorno y otros productos fotosintéticos. Las plantas vasculares incluyen helechos, musgos, plantas con flores, coníferas y otras gimnospermas. El nombre científico de este grupo es Traqueófitas vascular.

Varios grupos de algas son objeto de debate en cuanto a si deben ser incluidas en Plantae, sin embargo, vamos a seguir una definición que excluye a las algas de las plantas. Las plantas verdes, a menudo denominadas Viridiplantae, derivan la mayor parte de su energía de la luz solar a través de la fotosíntesis y son un subconjunto de las Plantas.

Metabolismo y crecimiento. El crecimiento de una planta está gobernado por factores medioambientales y ecológicos. Los principales factores ambientales incluyen parámetros meteorológicos, como la temperatura, la precipitación, velocidad del viento y la luz solar disponible, y los factores edáficos; como los nutrientes, humedad, granularidad y compactación del suelo, así como factores topográficos. Los factores ecológicos incluyen la competencia por el agua, nutrientes, luz y los recursos de otros miembros de la comunidad de plantas, así como la herbivoría y factores de pisoteo. Además, la presencia de enfermedades en las plantas desempeña un papel en el crecimiento y la propagación con éxito de las especies. En el último milenio, el papel de los seres humanos se ha convertido en un factor importante en la destrucción y fragmentación del hábitat, y aún no hay evidencia de la huella de los humanos sobre el cultivo selectivo de las especies.

La mayoría de la biomasa creada por una planta se deriva normalmente de la atmósfera. A través de un proceso conocido como fotosíntesis, la mayoría de las plantas utilizan la energía de la luz solar para convertir el dióxido de carbono de la atmósfera, además de agua, en azúcares simples, que se utilizan como bloques de construcción y forman los componentes estructurales principales. La clorofila, una molécula que le da una apariencia verde a la planta, está presente típicamente en las hojas de la planta, así como a menudo y en otras partes de la planta para absorber la luz solar y alimentar el proceso de fotosíntesis. Las plantas parásitas, por el contrario, derivan sus recursos de los nutrientes de un host. Las plantas carnívoras capturan realmente a sus presas (pequeños animales) para obtener sus nutrientes esenciales. Las plantas suelen depender de suelo no solo para el soporte arquitectónico y la absorción de agua, sino también obtener nutrientes como el nitrógeno y el fósforo del suelo. Las plantas epifitas y litófitas a menudo dependen del agua de lluvia u otras fuentes de nutrientes. Algunas plantas vasculares especializadas, como los manglares, pueden crecer con sus raíces en condiciones anóxicas.

Ecología. Las plantas constituyen la mayor parte de la producción primaria de los ecosistemas de la Tierra. Es decir, que producen la mayor parte de la biomasa de los nutrientes de la luz, dióxido de carbono y el suelo. La piedra angular de esta productividad primaria es la fotosíntesis, lo que alteró radicalmente la composición de la atmósfera de la Tierra primitiva, y que resultó en un aire con un 21% de oxígeno. Los animales dependen del oxígeno, así como de sus fuentes de alimento para los herbívoros, las plantas también proporcionan lugares de refugio y nidación para muchas especies.

Las plantas terrestres son componentes claves del ciclo del agua y varios otros ciclos biogeoquímicos. Algunas plantas han co-evolucionado con bacterias fijadoras de nitrógeno, teniendo una parte importante del ciclo del nitrógeno. Las raíces de las plantas desempeñan un papel esencial en el desarrollo del suelo y previenen la erosión de este.

La mayoría de las plantas tienen hongos asociados a sus sistemas de raíces, en una especie de simbiosis mutualista, conocida como micorrizas, una función importante de este tipo de simbiosis es la mejora de la absorción de fósforo. Los hongos ayudan a las plantas en el aumento del agua y nutrientes minerales que pueden absorber del suelo, mientras que la planta les da a los hongos los carbohidratos producidos en la fotosíntesis. Algunas plantas sirven como hogares para hongos endofíticos, que protegen la planta contra los herbívoros mediante la producción de toxinas. De hecho, la mayoría de las plantas contienen variedad de microorganismos endofíticos, cada uno de las cuales produce un conjunto único de productos químicos que pueden ser útiles a la planta huésped.

Varias formas de parasitismo son también bastante comunes entre las plantas, desde el muérdago semi-parasitario, que simplemente extrae nutrientes de su huésped, pero también tiene capacidad fotosintética, a la Lathraea totalmente parasitaria que adquiere todos sus nutrientes a través de conductos a las raíces de otras plantas.

Asociaciones vegetales. En un ecosistema dado, normalmente existe una asociación vegetal bien definida, lo que comúnmente se caracteriza por un estrato de dosel, una capa intermedia (o arbustos), y una capa de suelo o sotobosque forestal. En el caso de las praderas, tundras, y ciertos biomas sin árboles, la parte superior de una o dos capas pueden estar ausentes, aunque en estos casos suele haber diferencias importantes en la estratificación y altura de las plantas. Una asociación de planta dada, por supuesto, dependerá de ciertos tipos de suelos, meteorología, y la mezcla de fauna, por otra parte, la asociación puede manifestarse con marcadas diferencias estacionales en los entornos templados y boreales. La caracterización de una asociación vegetal es de gran ayuda para los botánicos, como una guía para la identificación de plantas y la investigación ecológica.

Interacciones con los seres humanos. La mayor parte de la dieta humana se deriva de las plantas y, además, una gran parte de las materias primas para nuestras casas, ropa y otras necesidades de la vida del homo sapiens se obtiene a partir de productos vegetales. Por otra parte, un sinnúmero de extractos medicinales se han producido, y se producen a partir de las plantas. Los anillos de un árbol son un método de datación arqueológico, y sirven como un registro de climas pasados. La investigación biológica básica, a menudo, se realiza con las plantas, tales como el uso de registros de los núcleos de polen para estudiar el pasado lejano, o las plantas de guisantes utilizadas para derivar las leyes de la genética de Mendel. Los estudios del uso de las plantas en las culturas indígenas, nos ayuda a conservar especies en peligro de extinción, así como a descubrir nuevas hierbas medicinales. La jardinería es la superior actividad de ocio en muchas regiones del mundo.

Las plantas han sido fuente de interés para los seres humanos durante miles de años, más allá de su uso como alimento. El cultivar un huerto con fines ornamentales, y el uso de flores para la decoración se han observado por lo menos desde la Edad de Bronce, en Egipto, Creta, y en las culturas celtas. Los primeros científicos, tales como los griegos, hicieron un esfuerzo considerable en describir y caracterizar la morfología de las diversas especies. Las plantas han sido un elemento importante del arte humano, con elementos de su arquitectura en la ornamentación de la cerámica y la decoración en otros Neolíticos desde  la Edad de Bronce en China, Creta, África del Sur, Islas Británicas, Egipto, y en las civilizaciones mayas. A modo de ejemplo, los glifos se encuentran en la cerámica minoica, y datan del 1850 aC, contienen diseños de ramitas de olivo, azafrán y trigo.

Específico para la jardinería, las plantas han sido utilizadas a lo largo de la historia no sólo como adorno para espacios interiores y exteriores, sino también para modificar los microclimas y hacer las habitaciones más cómodas. Por ejemplo, las cercas de arbustos se han utilizado, sobre todo en el último milenio en Europa como parabrisas para el ganado, y la separación de los pastos, para asegurar la propiedad del ganado. El paisajismo también se ha utilizado durante siglos como un método de mejora del microclima para la vida humana, incluyendo protección contra el viento, el amortiguamiento térmico, y la modificación de la humedad atmosférica.