Descripción. La planta de jarra tropical de Asia se encuentra entre las más grandes y espectaculares plantas carnívoras del mundo y está equipada con grandes hojas en forma de jarra con las que atrapa y digiere pequeños organismos. Estas trampas mortales cuelgan de zarcillos en espiral y están llenas de jugos gástricos ácidos. Con el fin de evitar que el líquido digestivo se diluya por el agua de lluvia, la trampa se va cubriendo con una tapa pequeña a medida que crece, la cual se abre cuando la planta está completamente desarrollada. Una de las especies más sorprendentes es la planta de jarra con colmillos, una especie grande e impresionante, famosa por los dos colmillos amenazadores en forma de espinas que sobresalen hacia abajo desde su tapa, distinguiéndola de cualquier otra especie. El color de esta especie es típicamente verde amarillento o anaranjado, y rojo de vez en cuando.
La planta de jarra con colmillos también es conocida con el nombre Nepenthes Dyak y puede alcanzar una altura de 25 cm, así como 16 cm de ancho.
Reino: Plantas
Phylum Traqueófitas
Clasificación: Magnoliopsida
Orden: Nepenthales
Familia: Nepenthaceae
Género: Nepenthes
Biología. Esta planta ha evolucionado sus hábitos carnívoros en respuesta a la carencia de hábitats altamente ricos en nutrientes. Ella es capaz de descomponer y absorber el nitrógeno y otros nutrientes de los animales, por lo general invertebrados, como los insectos que se convierten en su presa. Esto complementa cualquier nutrición obtenida de los suelos y por lo tanto le permite sobrevivir donde otras plantas no pueden. Sus presas son atraídas con néctar, aromas y señales visuales, tales como el color. El borde de la jarra, el peristoma, produce mayor cantidad de néctar y los insectos caminan sobre la superficie resbaladiza, suelen caer. Al no poder escapar, se ahogan en el líquido de la jarra y sus cuerpos se descomponen por las enzimas digestivas.
Al igual que muchas especies de Nepenthes, la planta de jarra con colmillos también ha desarrollado una relación mutualista con insectos. Las hormigas Camponotus schmitzi construyen nidos en los huecos de los zarcillos de la planta y son capaces de correr hacia arriba y abajo por las paredes de la jarra sin caer en ella. En un giro inusual, estas hormigas ayudan a la planta de jarra con colmillos no con la alimentación, sino con la eliminación de algunas de sus presas más grandes. Cuando las plantas de jarra atrapan insectos de gran tamaño u otras presas grandes, estos pueden empezar a deteriorarse antes de ser digeridos y esta putrefacción puede extenderse a la jarra y acortar su vida útil. Entonces las hormigas transportan estos fragmentos más grandes, rompiéndolos en pedazos más pequeños para alimentarse, obteniendo así su recompensa.
Esta planta es dioica, lo que significa que las plantas masculinas están separadas de las femeninas. Sus polinizadores más probables incluyen moscas, polillas, escarabajos, chinches y hormigas, las cuales han sido observados visitando las flores. El fruto tarda alrededor de tres meses en desarrollarse y puede contener 500 o más semillas, que son muy ligeros, tienen alas largas y son transportadas por el viento de un lugar a otro.
Distribución. Se encuentra sólo en la isla de Borneo, en Brunei Darussalam, Kalimantan en Indonesia, así como en Sabah y Sarawak, en Malasia.
Hábitat. Se encuentra comúnmente en bosques palustres de turba y arena, desde el nivel del mar hasta los 950 metros sobre el nivel del mar.
Estado. Está clasificada como Vulnerable (VU) en la Lista Roja de la UICN y en el Apéndice II de la CITES.
Amenazas. La principal amenaza para las plantas de jarra tropical (Nepenthes) es la destrucción de su hábitat, sin embargo, como todas las plantas ornamentales populares, también son ampliamente extraídas de su entorno natural, lo que unido a la recolección comercial y el comercio ilegal, ha provocado que sus bajos números poblacionales se hayan visto fuertemente afectados.
Conservación. Todas las especies de Nepenthes están listadas en el Apéndice II de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas (CITES), que restringe el comercio legal de estas plantas. También se han implementado mecanismos para producir nuevos cultivos de esta planta, ya que esta puede ser la mejor forma de ayudar a aumentar significativamente el número de poblaciones silvestres.