Descripción. Reconocida por la calidad muy apreciada de su madera, el ébano negro es un árbol que fue explotado a gran escala durante algunos siglos. Puede alcanzar hasta 20 metros de altura, su tronco es negro y a menudo se encuentra cubierto por líquenes de color blanco. Sus flores aromáticas suelen ser de color blanco, aunque en ocasiones pueden tener un ligero tinte rosado. Su fruta verde y en forma de huevo es carnosa y fragante.
Reino: Plantas
Tracheophyta Phylum
Clasificación: Magnoliopsida
Orden: Ebenales
Familia: Ebenaceae
Género: Diospyros
Biología. La distribución relativamente amplia del ébano negro, en comparación con las otras especies de Diospyros endémicas, seguramente se puede explicar mediante la calidad nutritiva de su fruto carnoso y fragante, el cual junto con las preciosas semillas, a veces se dispersan a distancias considerables. Uno de los animales que se distingue por comer el fruto del ébano negro es el zorro volador negro de Mauricio, que también disfruta comiéndose las flores de este árbol, afectando así negativamente la capacidad de reproducción de la especie.
Distribución. El ébano negro es el más extendido de los once Diospyros endémicas especies en la isla Mauricio. Ha logrado establecerse en altitudes bajas, medias y altas, encontrándose principalmente en las sierras orientales y al sur-oeste de la isla.
Hábitat. Habita en las tierras bajas de bosques siempre verdes y lluviosos de regiones tropicales y subtropicales.
Estado. Clasificada como Vulnerable (VU) en la Lista Roja de la UICN.
Amenazas. Además de la fuerte explotación del ébano negro por su madera durante el siglo 17, actividades como la agricultura, la silvicultura, la implantación de pueblos y ciudades, el paisaje de Mauricio se ha transformado irreversiblemente. Cuando la isla fue colonizada, estaba cubierta de una densa vegetación, pero los bosques nativos en la actualidad ocupan menos del 2% de la isla y se limitan a cadenas montañosas y reservas protegidas. Lasplantas exóticas invasoras, que compiten con las plantas nativas por el agua, la luz y los nutrientes, representan una amenaza adicional para los bosques nativos que aún quedan.
Conservación. Teniendo en cuenta que la última evaluación de la UICN de ébano negro se llevó a cabo en 1998, el estado actual de esta especie no es bien conocido. No obstante, con el fin de proteger los bosques nativos restantes y su flora endémica, los Parques Nacionales y Servicio de Conservación han establecido Áreas de Manejo de Conservación en el Parque Nacional Río Negro Gargantas, que excluyen a las especies invasoras. Además, fue creado el Centro de Propagación de Plantas Nativas en 1997 para propagar plantas nativas y endémicas amenazadas con la ayuda de un vivero controlado.