Existen muchas leyendas sobre el dingo, un tipo de perro salvaje, algunas de ellas narran que son capaces de tomar bebés humanos de tiendas de campaña en la oscuridad de la noche. Parece una locura, pero hay expertos que le dan mucha credibilidad. Como resultado de estas historias, el dingo ha conseguido una terrible reputación.

Estado de conservación: vulnerable.

Descripción. El dingo varía en tamaño, desde 3 ½ a 4 pies de altura, con una cola de más de un pie de largo. Pueden pesar de 20 a 35 libras, y los machos suelen ser más grandes que las hembras. Varían en color, incluyendo todos los tonos de marrón, gris, e incluso algunos tonos rojizos. A menudo se parecen a un perro doméstico debido al hecho de que muchos de ellos son cruzados con perros domésticos.

Distribución. Hoy en día el dngo vive en Australia, pero en realidad es nativo de Asia. Fue introducido a Australia hace unos 3.000 años,  y lo ha hecho muy bien. Poseen amplios territorios y viven en cualquier lugar mientras puedan encontrar comida y refugio.

Comportamiento. Aunque la mayoría de los perros salvajes viven en manadas, el dingo no necesariamente sigue su ejemplo. Hay aquellos viven en manadas de hasta 10 miembros, estos poseen una complejo jerarquía, con un macho y una hembra dominante. También están aquellos que viven solos, en muchos casos dejan la manada para poder aparearse y crear su propio grupo, en otros casos puede haber sido exiliados de la manada a la que pertenecieron.

Alimentación. La ventaja para el dingo de ser parte de una jauría tiene que ver con la posibilidad de cazar juntos. Pueden ser muy estratégicos en los métodos de caza y rodear completamente la presa. Es más difícil para un dingo solo conseguir presas, pero pueden sobrevivir con algunas criaturas más pequeñas.

Consumen variedad de diferentes tipos de alimentos, que pueden incluir conejos, roedores, reptiles, aves, plantas, frutas, y cualquier cosa que puedan ser capaces de recoger de los seres humanos. En muchos lugares hay gente acampando o viviendo cerca de ellos. Son animales inteligentes, por lo que vuelven a estos lugares donde saben que serán capaces de obtener alimentos fáciles.

En algunos lugares el dingo es considerado una molestia, han sido conocidos por consumir ovejas criadas por los humanos, e incluso las vallas no han detenido el problema. En algunos lugares, los dingos están siendo disparados, atrapados o envenenados para erradicar el problema.

Reproducción. En una manada sólo el macho y la hembra dominante se aparean. Si otros machos desean aparearse deben salir de la manada. La hembra llevará a los jóvenes en su cuerpo durante un par de meses, y su camada puede ser de 5 a 8 cachorros por vez.

Los jóvenes son impotentes cuando nacen, y dependen de su madre para alimentarse. A medida que crecen se presentarán al resto de la manada. Todos ayudarán con el cuidado de los jóvenes y su protección. Muchos expertos están preocupados acerca de la genética del dingo, pues se estima que aproximadamente un tercio de la población actual son híbridos entre el dingo y los perros domésticos.