Las aves se forman dentro de los huevos, que son protegidos e incubados durante muchos días o semanas por la madre o el padre. Este proceso se llama incubación. Después del nacimiento con la ruptura del cascarón, los pichones son alimentados por sus padres. Cuando finalmente desarrollan todo su plumaje, aprenden a volar. Pronto después de volar comenzarán a vivir por su cuenta. Al año siguiente ya son capaces de aparearse y tener sus propias crías. El ciclo comienza nuevamente.
