El caballito de mar pigmeo (Hippocampus bargibanti) es, sin duda, una de las especies mejor camufladas en los océanos, siendo extremadamente difícil de detectar entre los corales gorgonia en que habita. Tan eficaz es este camuflaje que la especie no fue realmente descubierta hasta que se examinó su anfitrión gorgonia en un laboratorio. Grandes tubérculos bulbosos cubren el cuerpo de esta especie que coinciden con el color y la forma de los pólipos de sus especies hospedantes, los corales gorgonias, mientras que su cuerpo coincide con el vástago de estos. Pueden ser de dos colores: gris pálido o púrpura, encontrándose individuos dispersos con tubérculos de color rosa o rojo en corales gorgonias con similares colores (Muricella plectana) y los ejemplares de color amarillo con tubérculos de color naranja se encuentran en corales gorgonias (Muricella paraplectana). No se sabe si los individuos pueden cambiar de color si cambian de anfitrión, aunque la capacidad de cambiar de color de acuerdo con su entorno existe en algunas otras especies de caballitos de mar tales como el Hippocampus whitei. Otras características distintivas de los caballitos de mar pigmeos incluyen una cabeza y cuerpo grueso, un hocico corto y una cola larga y prensil. Esta es también una de las especies de caballitos de mar más pequeña del mundo, por lo general mide menos de 2 centímetros de altura. El macho lleva los huevos y las crías escondidos dentro de la región del tronco.

Tallas: Altura máxima: 2.4 cm.

Biología. Los adultos se encuentran generalmente en parejas o grupos de parejas, con un máximo de 28 caballitos de mar pigmeos en una sola gorgonia y pueden ser monógamos. Curiosamente es el macho y no la hembra quien queda embarazado. La reproducción tiene lugar durante todo el año y el promedio de gestación es de dos semanas, durante el cual el macho lleva los huevos escondidos en la región del tronco. En un parto presenciado bajo el agua se vio a un macho “dando a luz” a una camada de 34 crías vivas. Los caballitos de mar recién nacidos parecen adultos en miniatura, son independientes desde el nacimiento y no reciben ninguna atención de sus padres a partir de ese momento.

Rango. El caballito de mar pigmeo se encuentra en los arrecifes de coral en el Pacífico Tropical Occidental alrededor de Australia (Queensland), Indonesia, Japón, Nueva Caledonia, Papúa Nueva Guinea y Filipinas.

Hábitat. Sólo se tiene conocimiento de que habitan en los corales gorgonias del género Muricella, encuentrándose normalmente entre 16 y 40 metros de profundidad.

Estado. El caballito de mar pigmeo se clasifica como Datos Insuficientes (DD) en la Lista Roja de la UICN y figura en el Apéndice II de CITES.

Amenazas. Muy poco se sabe sobre el número total de caballitos de mar pigmeos, las tendencias demográficas, la distribución o las principales amenazas. Por ello, ha sido clasificado como Datos Insuficientes en la Lista Roja de la UICN. A causa de la inusual y atractiva coloración de este pequeño caballito de mar, es posible que esté siendo capturado para el comercio de acuarios, aunque la especie no ha sido registrada en el comercio internacional.

Conservación. Todos los caballitos de mar (Hippocampus spp.) figuran en el Apéndice II de CITES en vigor desde mayo de 2004, limitando y regulando su comercio internacional. Las poblaciones australianas de caballitos de mar pigmeos están registrados en la Ley de protección de la fauna australiana, por lo que los permisos de exportación son obligatorios a pesar de que sólo se conceden para los planes de manejo aprobados o de animales criados en cautiverio. Con estos escasos datos disponibles sobre este fascinante animal, hay una necesidad urgente de realizar más investigación para conocer su biología, ecología, hábitat, abundancia y distribución, antes de que su estado pueda ser evaluado adecuadamente para que las medidas de conservación puedan aplicarse correctamente. El camuflaje eficaz de esta asombrosa especie puede hacer este tipo de encuestas especialmente difícil, pero afortunadamente ayude a protegerlo contra la explotación, manteniéndolo seguro y oculto en los arrecifes del Pacífico donde pertenece.