El Asno salvaje africano (Equus africanus) es el ancestro del asno doméstico y tiene un cuerpo robusto. El pelaje corto y liso va de un gris claro a un tono azulado también claro, desvaneciéndose a blanco en la parte inferior y las patas. Existen dos subespecies y ambas tienen una banda oscura en la espalda, en  el caso del asno salvaje de Somalia (Equus africanus somalicus) también tiene rayas horizontales en las patas como las de las cebras. Las orejas son grandes y negras en los bordes al igual que la gruesa y  recta melena.

Tallas:

Longitud: 200 cm.

Altura de los hombros: de 125 a 145 cm.

Peso: 275 kg.

Biología del Asno salvaje africano. El Asno salvaje africano tiene una distribución social armónica, con frecuencia se reúne en manadas temporales de uno o de ambos sexos que duran unos pocos meses y pueden contener un máximo de 50 individuos. Los machos maduros tienden a ocupar grandes territorios que a menudo se sitúan en torno a un suministro de agua que les permite tener acceso a las hembras receptivas que pasan por la zona. Otros machos forman grupos de solteros y las hembras pueden agruparse con otras hembras o con sus propios hijos. Las hembras suelen tener un potro cada dos años y los nacimientos ocurren durante la estación lluviosa.

Están activos al amanecer y en el atardecer, los Asnos salvajes africanos buscan sombra para resguardarse del calor y son capaces de sobrevivir sin agua durante varios días. Estos herbívoros comen una gran variedad de pastos y hierbas. En cautiverio han llegado a vivir hasta 40 años.

Rango del Asno salvaje africano. Anteriormente se encontraba en el norte de África, desde las montañas del Atlas de Marruecos a Sudán y Somalia. Hoy en día las poblaciones dispersas se limitan a Djibouti, Eritrea, Etiopía y Somalia, se encuentran extintos en Egipto y Sudán.

Hábitat del Asno salvaje africano. El Asno salvaje africano habita en zonas áridas como colinas y desiertos pedregosos, matorrales y praderas semi-áridas donde existe acceso a las aguas superficiales.

Estado del Asno salvaje africano. El Asno salvaje africano está clasificado como una especie En Peligro Crítico (CR) en la Lista Roja de la UICN y figura en el Apéndice I de CITES. Las Subespecies: Asno salvaje  de Nubia (Equus africanus africanus) y el Asno salvaje somalí (Equus africanus somalicus) están clasificados como En Peligro Crítico (CR) en la Lista Roja de la UICN.

Amenazas para el Asno salvaje africano. El Asno salvaje africano ha sido capturado para la domesticación durante siglos, el cruce entre animales salvajes y domésticos ha provocado un claro descenso en el número de su población. En la actualidad hay sólo unos pocos cientos de individuos en su hábitat natural y la especie está amenazada por peligro de extinción. Estos animales son cazados como alimento y medicina tradicional en Etiopía y Somalia donde los recientes disturbios civiles han incrementado el número de armas en circulación. La competencia con el ganado doméstico para el pastoreo y el acceso restringido a los suministros de agua causados por la evolución de la agricultura, plantean una mayor amenaza para la supervivencia de esta especie.

Conservación del Asno salvaje africano. El Asno salvaje africano está legalmente protegido en los países en los que se encuentra actualmente, a pesar de su existencia, estas medidas a menudo resultan difíciles de hacer cumplir. Otras medidas de protección más eficaces deben ser adoptadas para que el estatus de esta especie mejore. La protección de las poblaciones de Asnos salvajes somalíes es mucho más fuerte en la Reserva Natural YotvataHai-Bar (Reserva de animales salvajes) de Israel, al norte de Eilat. Esta reserva fue creada en 1968 con el fin de reforzar las poblaciones de especies del desierto en peligro. Las poblaciones de caballos y asnos generalmente son bastante resistentes y si la especie llega a estar correctamente protegida puede que llegue a recuperarse de su situación actual.